¿En busca de una nueva anilladora? Ya sea para el uso empresarial o para iniciar un emprendimiento, es necesario disponer del equipo correcto para obtener los mejores resultados. Pero, ¿cuál es la idónea para cada caso? ¿Una espiraladora? ¿O quizás una anilladora? En las próximas líneas, explicamos las principales características de cada una de ellas, que nos ayudarán a comprender cuál es la diferencia entre anilladora y espiraladora.

¿Qué es una espiraladora y cómo funciona?

Son máquinas que permiten realizar encuadernaciones utilizando tiras de espirales que suelen ser de plástico y están disponibles en diferentes tamaños y colores. Son de gran utilidad para mantener organizados, protegidos y con buena presentación documentos como informes, trabajos de reprografía y similares. En el mercado podemos hallar tanto equipos eléctricos como manuales.

Para realizar una encuadernación con una máquina espiraladora, primero debemos colocar los papeles o micas en la superficie correspondiente, fijándonos en que queden bien posicionados y que tengan el margen adecuado para el proyecto a realizar. La cantidad de hojas que emplearemos cada vez se verá condicionado por las especificaciones del equipo utilizado y los gramajes del papel.

En una espiraladora manual, bajaremos la palanca para realizar las perforaciones. En el caso de una eléctrica, solo pulsaremos el botón o el pedal. Una vez tengamos todas las partes listas y ordenadas, insertaremos una espiral de un tamaño acorde a la cantidad de hojas que vayamos a encuadernar. Para llevarlo a cabo, giraremos manualmente la espiral a través de los agujeros, o nos valdremos de un insertador de espiral automático. Este último recurso resulta especialmente útil si poseemos una espiralera eléctrica.

Es importante mencionar que, en general, las espiraleras de oficina realizan entre 10 a 20 perforaciones de hojas por vez y pueden encuadernar hasta 400 hojas.

En las espiraleras, el orificio de perforación en general es redondo.

Usos y características de una anilladora

Las anilladoras permiten usar dos tipos de tiras de anillos. La primera, de anillo simple, es idónea para encuadernar documentos como informes, tesis o catálogos, ya que las anillas pueden separarse fácilmente si necesitamos añadir, suprimir o reemplazar hojas tras el encuadernado. El segundo tipo, el de anilla doble o wire-o, consiste en tiras de anillas de metal que suelen emplearse en libretas, cuadernos, agendas y similares. Son resistentes y confieren un aspecto profesional a este tipo de productos.

Para iniciar el proceso de encuadernado con una máquina anilladora, procederemos del mismo modo que con la espiralera, es decir, perforaremos todas las hojas, la tapa y la contratapa. A partir de este punto comienza la diferencia, ordenaremos todas las partes, incluida la tira de anillos, en el soporte integrado en el equipo para este fin. Después, con cuidado, lo colocaremos todo en el cerrador de wire-o y bajaremos la palanca. Como resultado, la tira de anillas se cerrará y la encuadernación quedará terminada.

En las anilladoras, el orificio de perforación en general es cuadrado y más grande para que el anillo doble cero calce perfectamente.

Por otro lado, en las anilladoras existe lo que se conoce como paso 2:1 y 3:1 que significa la cantidad de agujeros que entran por pulgada, es decir, en el paso 2:1 entre 2 agujeros por pulgada mientras que en el paso 3:1 serían 3 agujeros por pulgada. Por ello, las anilladoras paso 3:1 se utilizan con anillos para encuadernar hasta 120 hojas aprox mientras que la 2:1 para anillos que permiten encuadernados de más de 120 hojas. 

Diferencia entre anilladora y espiraladora

Llegados a este punto, podemos concluir que ambos equipos difieren, principalmente, en el sistema de anillado. En otras palabras, si preferimos usar una espiral continua o una tira de anillas. Esta última tiene la particularidad de colocarse más rápido que la primera, en máquinas manuales.

Otra diferencia radica en que la espiraladora produce perforaciones circulares, mientras que las de la anilladora suelen ser cuadradas, aunque existen excepciones. Una espiraladora manual es una alternativa más económica, tanto en cuanto a la propia maquinaria como a sus accesorios, y funciona muy bien, sobre todo, en reprografía. La anilladora, por su parte, es más versátil y resulta apropiada para crear libretas y/o agendas. La elección dependerá de las necesidades del proyecto en concreto o de la empresa.

En Nueva Aliada, disponemos tanto de anilladoras como de espiraladoras de la mejor calidad. Invitamos a los interesados en utilizarlas a consultarnos para recibir asesoramiento personalizado sin compromiso. Para ello, basta con acceder a nuestro chat de atención al cliente o rellenar el formulario de contacto.

Recientemente incorporamos al negocio servicios de impresión y encuadernado, por lo que te invitamos a visitar nuestra página de servicios en www.ograf.cl.